La Piel

La textura de las maderas nativas en los revestimientos exteriores distingue a las iglesias chilotas. Sin embargo, algunos de los templos de mayor valoración arquitectónica han mutado su piel hacia revestimientos de planchas metálicas en algunas caras o en todas ─incluso en varios de los templos distinguidos por la UNESCO─, lo que no las hace menos merecedoras del reconocimiento de expertos por conservar la esencia de la arquitectura de entramados y del oficio del carpintero.

De las doce iglesias rurales, todas conservan, en su totalidad o parcialmente, el revestimiento de madera, mayoritariamente de tejuela de alerce o de tinglado, ya sea como único revestimiento o en combinación. Las cubiertas, por otro lado, han ido incorporando, progresivamente, las láminas zincadas como material de reemplazo de las tejuelas de alerce. Algunas de estas iglesias corresponden a los cada vez más escasos ejemplos que aún exhiben en sus revestimientos exteriores la tejuela de alerce en todas sus caras, incluso en sus cubiertas. Es el caso de las iglesias de Caulín, Matao, Compu y Huyar Bajo.

 
 

la grandeza de las 12 pequeñas iglesias